alergias primaverales

Desde hace algo más de un mes, si el sonido de estornudos más o menos estridente, el consumo desenfrenado de pañuelos de papel, los nombres de Ebastina, Civeran, Muntel, Ventolín, Rhinocort, y otros parecidos, son lugares y nombres comunes que os suenan a los que estáis leyendo esto no hace falta dar más vueltas, SOIS ALÉRGICOS, como por desgracia lo es un servidor.

Maldita enfermedad esta que hace que desde que uno se levanta de la cama, el concierto de estornudos, el picor de ojos, el lagrimeo, el moquillo incesante, especialmente a primeras horas de la mañana, se convierten en nuestros compañeros de viaje habituales. No sé si esto sólo es cosa de los "tiempos actuales" pero todo apunta a que la contaminación, el exceso de higiene, además de la vida urbana y el escaso contacto con la vida campestre, agudizan y hacen que cada vez seamos más los que engrosamos el club de los alérgicos. A pesar de que la explosión de belleza del entorno natural de Ibi en primavera, especialmente en años lluviosos como este, nos invita como a cualquiera a salir al campo o a la sierra, uno debe de andar con mucho cuidado ya que el durante y el después se pueden convertir en un auténtico suplicio. Los días de lluvia sin embargo, constituyen un bálsamo y una tregua en nuestros estornudos y picores.

Un servidor es alérgico a las gramíneas, a los ácaros del polvo, al polen de los olivos, y a no sé cuantas cosas más, con lo cual, desde el mes de abril hasta prácticamente finales de junio, salir a la calle en días soleados y con algo de viento y ya no digamos al campo, se convierte en toda una aventura. Como muchos de los que estaréis leyendo esto, durante más de seis años estuve vacunándome pero todo seguía igual. Según explican, si la alergia es a las gramíneas la vacunación puede contribuir a erradicar o disminuir sensiblemente los síntomas, pero si lo eres a varios tipos de pólenes, la vacunación no es demasiado efectiva. Los conocidos antihistamínicos, sprays de control del asma, inhaladores y remedios varios contribuyen a disminuir los síntomas pero, ay, además de dar sueño y dejarte como atontado todo el día, abren el apetito, lo cual para los que ya tenemos buen "saque" es lo que nos falta.

Además, para acabarlo de arreglar, en Ibi, tenemos la suerte de estar rodeados de una abundante, preciosa y magnífica vegetación donde todo lo que provoca alergia abunda. Y por si fuera poco, allá por el mes de febrero marzo, hay tres semanas donde la polinización de los pinos, el ciprés y los plátanos, también nos dejan tan tocados como ahora. En fin, curioso mundo este y curioso cuerpo que provoca rechazo a lo que nos rodea. Aunque no me sirve de consuelo, cada vez es más numeroso el club de alérgicos y alérgicas, así que, vaya en honor de todos ellos la entrada de hoy. Pinchando en este enlace, podréis acceder a una web donde conocer más lo que algunos ya sabréis y adoptar medidas para disminuir o paliar los síntomas, que no hacer que desaparezcan. Mientras tanto, esperaremos a que pase la primavera y, el que pueda, que se vaya a la playa, que es lo que recomiendan los alergólogos.

Como en el diván del psiquiatra, espero que compartir nuestros síntomas alérgicos nos ayude a llevarlos mejor. Siempre os queda seguir estos CONSEJOS

P.D. El club deportivo TEIXERETA oraniza las 13 horas de baloncesto, desde mañana sábado a las 8'45 de la mañana. Estáis todos invitados.