Ayer a las 23'10 horas, terminaba el pleno ordinario del mes de febrero que había dado comienzo cuatro horas antes. El salón de plenos, una vez más, presentaba un lleno casi completo. Indudablemente, la cercanía de las elecciones y la pertinaz insistencia de nuestros gobernantes en llevar a pleno mociones para arreglarse sus cortijos, hace que el interés en la ciudadanía se incremente por ver en directo si este ex-equipo es capaz de perpetrar las tropelías que llevan preparando meses.
No obstante,
de todos los debates interesantes que se produjeron ayer, cabe reseñar dos cuestiones importantes. La primera, la fragilidad del grupo de trece concejales que, vía mayoría absoluta, se hicieron con el gobierno de Ibi con un poder obtenido a base de engaños, montajes, mentiras y falsas promesas,
se hizo más patente que nunca a lo largo de toda la legislatura.
Los concejales Rafael Pastor, todavía en el grupo popular y al que hace meses que le retiraron sus delegaciones por enfrentarse a las decisiones de la alcaldesa, y Felicidad Peñalver, expulsada del grupo popular local y único miembro del grupo de los concejales no adscritos, votaron por primera vez en toda la legislatura, en contra de una moción del partido por el que concurrieron a las elecciones. No fue la moción de la famosa valla de la alcaldesa, no. Antes de que llegara ese punto del orden del día, se llevaba la enésima moción para aprobar RECONOCIMIENTO EXTRAJUDICIAL DE CRÉDITOS. Esto, traducido al cristiano, significa, para pagar facturas millonarias que están por diversos cajones del Ayuntamiento, que pertenecen a hace varios años, y que para que el déficit que han presentado a la ciudadanía año tras año, no sea más escandaloso de lo que ya es.
Así,
cuando el Ayuntamiento ha obtenido nuevos préstamos de los bancos para pagar todas esas obras que ustedes ven ultimamente por ahí, cuando han tenido que refinanciar todos sus créditos a veinte años (el doble de lo que estaban) y cuando han tenido un escaso respiro y pueden pagar alguna de esas facturas pendientes, las llevan a pleno. Para no hacerlo largo, recomiendo encarecidamente que si tienen estómago y paciencia, pierdan un rato viendo en tele Ibi ese punto del debate.
No tiene desperdicio el penúltimo esperpento del pp, tratando de convencernos que eso de dejar facturas sin pagar de varios años es perfectamente normal. Luego, tiene menos desperdicio, ante lo demoledor de la argumentación y datos contrastados ofrecidos por todos los portavoces de la oposición, la petición de la alcaldesa al interventor para pronunciarse al respecto. Más demoledor todavía el chasco cuando el secretario REITERA SU REPARO DE LEGALIDAD AL PAGO DE ESAS FACTURAS, su obligación de informar a la Sindicatura de Cuentas, y la recomendación a los políticos con responsabilidad de gobierno, de llevarlas al Juzgado. Claro, en este punto, el Migue y su colegui ya no sabían por dónde salir.
De las cuatro facturas olvidadas por los cajones, había una que huele especialmente mal. Corresponde al alumbrado extraordinario de navidad y reyes 2008. La facturita asciende nada menos que a 48.536.- Euros. Esta factura, que ha permanecido más de dos años en los cajones, corresponde a la colocación de las luces de Navidad y reyes. Luces, que nadie discute que estuvieran colocadas, sería del género tonto. Así y todo, ese era el argumento del migue y su colegui, que las luces estuvieron colocadas. Para poder efectuar un reconocimiento extrajudicial de crédito, se exige una memoria (escrito argumentativo y justificativo) del concejal del área, otro del interventor, otro del concejal de hacienda que pretende aprobar el tema y lo que es más importante, la cara dura suficiente para convencernos de por qué esa contratación del alumbrado extraordinario, no pasó por el procedimiento de contratación legalmente previsto por la cuantía. Porque
ahí está el quid de la cuestión. No hay imprevistos en la llegada de la Navidad y los reyes, salvo que estos del pp estén tan pendientes de pelearse que ese año les viniera de "sopetón". Tampoco hay dudas en que la cuantía exige necesariamente sacar a concurso dicho servicio. ¿Por qué entonces se volvió a ADJUDICAR A DEDO A LA MISMA EMPRESA este servicio, a pesar de lo previsible del gasto y de la cuantía?La respuesta está en la mente de todos.
Reiteraban en Migue y su colegui, que el técnico había hecho un informe diciendo que "los precios se ajustaban a los del mercado". Ofrezco a través de esta bitácora, o bien contactando conmigo a través de correo elctrónico o personalmente, a las más de treinta empresas que en Ibi se dedican al montaje e instalación de electricidad, que me digan si efectivamente son precios de mercado. Para darles un simple detalle,
les diré que de esos 48 mil y pico euros de la factura, 10.915.- Euros (IVA no incluído), corresponderían al "mantenimiento del alumbrado" durante 37 días que al parecer estuvieron colocadas las luces. Eso nos da una media de 300 euros al día solamente por mantenimiento. Es decir, que se supone que esa empresa tuvo en Ibi a varios operarios los 37 días realizando esas hipotéticas operaciones de mantenimiento, y varias horas cada día. Pues eso, tendrá que justificarse con albaranes, presupuestos aprobados, desglose de horas de trabajo, etcétera, etcétera. Justo lo que no se ha hecho. Porque ya el técnico que firma el informe justificativo de tres líneas, dedica una de esas tres líneas a dejar claro que
"el técnico que suscribe no ha llevabo a cabo la contratación de esos trabajos". Al final, esto es el chocolate del loro. Bien sabe Agüera de empresas de electricidad, ya que bajo su mandato se han adjudicado trabajos por más de 800.000.- euros a una única empresa de Ibi con la que tiene relación familiar. El día que repasemos esas facturas no acabamos.
Al final, y
acorralados ante la evidencia y ante sus propias y abundantes mentiras, propusieron dejar esa factura fuera del reconocimiento extrajudicial. Se votó y se quedaron sólos, más solos que nunca. Diez concejales del pp, frente a los ocho concejales de la oposición más los dos votos también en contra, por primera vez, de Rafael Pastor y de Felicidad Peñalver. La alcaldesa tuvo que hacer uso de su voto de "calidad" para salir de ese atolladero en el que, no se engañen, se han metido ustedes solitos. Por cierto, ahora resulta que las butacas cuestan bastante más de lo que se dijo a la ciudadanía. Más de
OCHOCIENTOS EUROS POR BUTACA, quinientos euros más caros que las que ofertaba una empresa alicantina a la que suministran piezas más de cinco empresas de IBI. Los números del Teatro que ayer salieron a la luz fueron tan escandalosos, que seguiremos informando en otro capítulo. Pero ya les digo yo, que están hasta el cuello.... La moción de la valla de la alcaldesa, a la vista de que no contaban con los once votos que precisan para modificar el plan general (no les basta con mayoría simple), la dejaron sobre la mesa. Ja vorem qué pasa en el próximo pleno.
P.D. Felicidad Peñalver pidió la palabara para explicar su voto en contra, la alcaldesa la ignoró y le negó el derecho que tenemos los 21 concejales de la corporación a participar en los plenos. Más allá de la arbitrariedad e ilegalidad de la cuestión, por muy mal que se caigan, pone en evidencia que también para la alcaldesa hay clases y clases. Aún tenemos vivo el recuerdo de los dos concejales que la pasada legislatura formaban parte del grupo de los no adscritos, e intervenían pleno tras pleno, tenían despacho propio, tiempo a su disposición en medios de comunicación público y todos sus derechos íntegros. Pero claro, esta concejala era de su partido, y entonces la cosa cambia ¿verdad?