Ayer a las 13 horas estaba convocada la comisión informativa de Hacienda, régimen administrativo, personal y contratación. Lo fundamental era la aprobación definitiva del presupuesto, tras contestar las alegaciones efectuadas por grupos políticos y por algún colectivo de la localidad y ciudadanos a título particular. Las alegaciones de tipo técnico han sido respondidas con los preceptivos informes y desestimadas.
Pero lo más significativo fue el hecho de que se invitó a los representantes del colectiu Saginosa, como consecuencia de las alegaciones efectuadas a los presupuestos en relación con la no inclusión en el capítulo de inversiones de una partida para la compra del edificio del Antiguo Molí de paper. En su momento, cuando comenté en esta entrada lo más significativo del pleno de presupuestos, ya expliqué que en el mismo momento del pleno (antes nada se había planteado al resto del grupos, ni en las reuniones previas, ni a título personal al resto de portavoces de la oposición), Esquerra Unida presentó una enmienda a los presupuestos pidiendo que se incluyera la partida para la compra del Molí, y para ello solicitaba suprimir la partida que se había incluido para la compra del Cine Roxy.
Es público, notorio y conocido, que la propuesta para la adquisición del Cine Roxy era una propuesta de nuestro partido, Alternativa Democrática Independiente de Ibi. La necesidad de dotar en el casco histórico de un espacio que procure espacios para fomentar el ocio, la cultura y el tiempo libre, especialmente a la juventud, además de eliminar un foco de degradación, abandono y suciedad en pleno centro de la población, era algo necesario. También explicamos que la necesidad de evitar desde ya - se ha perdido mucho tiempo - que el Molí de Paper se caiga definitivamente, y de la posibilidad de adquirirlo para hacer un albergue y un centro de interpretación de la Ruta del BArranc dels Molins y punto de entrada desde Ibi al parc Natural de la Font Roja, no solamente era necesario, sino que desde ADIi ya llevamos dicha propuesta en nuestro programa electoral de 2003. Ambas propuestas ni eran ni son excluyentes y, junto con el abandono de la fábrica de Payá y otros muchos rincones de nuestro pueblo, reflejan muy bien la degradación del patrimonio de Ibi en las últimas dos décadas, resultando especialmente sangrante las nulas inversiones por parte del gobierno Agüera-Parra, en la época en que por la burbuja inmobiliaria entró dinero a espuertas.
Todo se fue a la especulación, a obras electoralistas (zona de ocio, casa reyes magos), que ahora permanecen en el olvido y en las que se tiraron millones a la basura. Desde nuestro grupo no entendíamos que la propuesta fuese quitar esta inversión para poner esta otra. Discutir cuestiones estériles no sirve absolutamente de nada y el movimiento se demuestra andando. Ayer, en la comisión informativa, desde ADIi hicimos la propuesta de dividir la partida del cine Roxy al 50%, dotando exactamente igual otra partida para la compra del Molí de Paper. Creemos firmemente en la necesidad de ambas inversiones, pero creemos aún más firmemente en que los diálogos de besugos, el hacer frentismos y el pensar que nuestras propuestas son las mejores y las del otro no, es política vieja y es pasado.
Si algo nos están demostrando los cambios que se avecinan, es que la gente ha dicho basta, está harta de partidos que se miran el ombligo y de el "y tú más". Y si algo tenemos claro desde ADIi, es que el futuro, el más inmediato, será un futuro de más diálogo, más búsqueda de consensos y más dejar de lado las cosas que separan a los partidos y buscar acuerdos. Las propuestas de ADIi pueden parecernos estupendas, pero sería un error no escuchar las de los demás, no debatir y no buscar soluciones. Ahora bien, dotar de dos partidas (simbólicas, no nos engañemos) para adquirir dos edificios no servirá de nada, si no seguimos exigiendo que nos paguen todo lo que se debe, si no gestionamos mejor las arcas públicas, y si no demostramos que los políticos locales estamos, más que ningún otro, al servicio de la gente (piense lo que piense y vote a quien vote), y no al servicio de nuestros ombligos. En esa esperanza estamos.
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